Calor Extremo: Las medidas de la Casa Blanca para proteger a las personas trabajadoras no son suficientes; Hay que actuar con audacia ante los riesgos mortales

8 Aug 2023

Extreme Heat:  White House measures to protect workers are not enough. Bold action needed to address deadly risks!

por Jessica E. Martinez y Marcy Goldstein-Gelb

Las medidas anunciadas la semana pasada por el Presidente Biden para proteger a las personas trabajadoras del calor extremo -incluidas la intensificación de la represión de las infracciones contra la seguridad frente al calor y el aumento de las inspecciones en las industrias de alto riesgo- son un modesto paso en la dirección correcta.

Trágicamente, las personas trabajadoras están enfermando y muriendo a causa del calor extremo provocado por el cambio climático. No es momento para medidas modestas. El Presidente, el Congreso, la OSHA federal y los(as) funcionarios(as) estatales y locales deben tomar medidas audaces, ahora, para reducir el riesgo y salvar vidas.

Debemos proseguir urgentemente la descarbonización de nuestra economía, con una transición justa totalmente financiada que garantice la seguridad del empleo y de los ingresos de los(as) trabajadores(as) afectados. Pero las personas  trabajadoras no pueden esperar mientras se desarrolla este proceso y no somos impotentes para actuar ante las temperaturas de tres dígitos que están rompiendo los termómetros en todo el planeta. Los golpes de calor y las enfermedades causadas por el calor, como otros riesgos laborales, se pueden prevenir.

Las medidas prácticas y basadas en pruebas, como pausas de descanso adecuadas, abundante agua fresca, acceso a la sombra, reducción de los horarios de trabajo, traslado del trabajo a las horas más frescas del día y un sistema de compañeros(as) para que ningún trabajador y/o trabajadora se quede solo(a), pueden y deben aplicarse ya en todos los entornos interiores y exteriores en los que haya calor extremo. 



No hay ninguna razón para que empresarios(as) esperen el resultado de un proceso normativo. Hay, sin duda, una razón para no esperar: en ausencia de medidas preventivas, más trabajadores(as) enfermarán y morirán por exposición al calor extremo. 

En el ámbito normativo, es importante saber que la actual cláusula de "obligación general" de la Ley de Seguridad y Salud en el Trabajo de EE.UU. obliga a empresarios(as) a proporcionar un lugar de trabajo libre de peligros conocidos, y eso incluye sin duda el conocido peligro del calor extremo. El Presidente Biden ha dado en el clavo al ordenar que se intensifiquen las inspecciones y la aplicación de la ley ante la actual situación de emergencia provocada por el calor.

Pero esto es una emergencia, y se puede hacer mucho más. Unas normas específicas de seguridad laboral, centradas en los peligros del calor extremo, pueden ofrecer más y mejor protección a las personas trabajadoras, haciendo hincapié en la formación, la reducción y el cumplimiento de las normas.

A tal fin:

  • El Presidente Biden debería ordenar a la OSHA federal que emita inmediatamente una Norma Temporal de Emergencia (ETS) para proteger a las personas trabajadoras del estrés térmico. Si morir tras horas de trabajo bajo un sol abrasador no es una emergencia, ¿qué lo es?
  • El Congreso también debe actuar de inmediato y promulgar una ley que exija a la OSHA federal la publicación de una norma provisional sobre el estrés térmico. Esto puede complementar y reforzar cualquier norma de emergencia emitida por la agencia.
  • La OSHA federal ya ha iniciado el largo proceso de creación de una norma de seguridad permanente sobre el estrés térmico, que debe completarse lo antes posible.
  • En la actualidad, sólo cinco de los 50 estados cuentan con normas de seguridad laboral para proteger contra la exposición al calor extremo; Oregón es el único estado que protege tanto a los(as) trabajadores(as) de interior como a los de exterior. 
  • Los responsables de la Seguridad en el Trabajo de todos los estados deben tomar medidas inmediatas para garantizar que sus normas estatales sobre el estrés térmico tengan un amplio alcance y una sólida protección.  La tarea es especialmente urgente en los 45 estados que carecen de normas específicas sobre la exposición al calor extremo en el lugar de trabajo. Con frecuencia, las normas estatales pueden elaborarse con mayor rapidez que las federales y, en virtud de la Ley federal de seguridad y salud en el trabajo, deben ser al menos tan estrictas -y pueden llegar a serlo- como las federales.
  • Los(as) funcionarios(as) municipales también pueden y deben considerar la posibilidad de aprobar ordenanzas locales que exijan descanso, sombra, agua y otras medidas para todos los trabajadores afectados de las industrias de alto riesgo. En Miami, una campaña dirigida por We Count (filial de nuestra organización, el Consejo Nacional para la Seguridad y la Salud en el Trabajo) ha reunido a cientos de trabajadores(as) agrícolas para exigir una ordenanza municipal sobre el calor que ofrezca protección a aproximadamente 80.000 trabajadores(as) agrícolas y de la construcción.

Increíblemente, el estado de Texas va en dirección contraria. Los ayuntamientos de Dallas y Austin han aprobado ordenanzas sobre el calor que obligan a los(as) empresarios(as), entre otras cosas, a dar a las personas trabajadoras de la construcción descansos de diez minutos cada cuatro horas en condiciones de calor extremo. 

Pero la legislatura del estado de Texas acaba de aprobar la llamada ley de la "Estrella de la Muerte", firmada por el gobernador Greg Abbott. Anulará estas y otras ordenanzas aprobadas por funcionarios(as) locales elegidos democráticamente. La nueva ley entrará en vigor el 1 de septiembre, cuando las temperaturas seguirán siendo peligrosamente altas en Texas. 

La ciudad de Dallas aprobó su ordenanza de protección contra el calor en 2015, tras la muerte evitable de Roendy Granillo. Este trabajador de la construcción de 25 años murió de un golpe de calor mientras instalaba suelos de madera en una obra sin aire acondicionado durante una ola de calor en Texas en 2015; su temperatura corporal era de 110 grados cuando murió.

En nuestra Conferencia Nacional sobre Seguridad y Salud de Trabajadores(as) de 2016, COSH Nacional rindió homenaje a la familia Granillo por sus esfuerzos para defender a otros(as) trabajadores(as) tras la trágica muerte de Roendy. La familia también apareció en "Building the American Dream", una película sobre los retos a los que se enfrentan las familias inmigrantes. 

Ahora es el momento de honrar, no de ignorar, lo que le ocurrió a Roendy Granillo. Y es hora de luchar por los millones de trabajadores(as) que construyen nuestros hogares, llevan comida a nuestras mesas y proporcionan otros bienes y servicios esenciales. Las temperaturas récord ponen a estas personas que están trabajando en peligro en estos momentos. Nuestro gobierno, a todos los niveles, debe responder, ahora mismo. 

Los autores son co directores ejecutivos del Consejo Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (COSH Nacional). (Este artículo también se publicó en inglés en CommonDreams.org)